Antes del primer saque, nuestros padres nos regalaron una presentación llena de ritmo, energía y sonrisas con una dinámica danza aeróbica que puso a todos en movimiento. Fue un momento de conexión, salud y diversión que reafirma que el deporte también se vive con alegría y entusiasmo. ¡Felicitaciones a todos los participantes por contagiar buena vibra y demostrar que el corazón también se entrena!
